¿Tienes un piercing infectado y no sabes qué hacer? La infección en un piercing puede ser incómoda, dolorosa e incluso preocupante, pero con los cuidados adecuados es posible solucionarla y evitar complicaciones.
En este artículo, te explicaremos cómo curar un piercing infectado, las razones por las que puede aparecer la infección, y te daremos los pasos para desinfectarlo correctamente. ¡Sigue leyendo para aprender a cuidar tu piercing como se merece!
¿Por qué se infecta un piercing?
Antes de abordar la solución, es importante entender por qué se infecta un piercing. Aunque los piercings son accesorios muy populares, pueden ser propensos a infecciones si no se cuidan adecuadamente. Aquí tienes algunas razones comunes:
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Falta de higiene: No lavar el área del piercing con regularidad o manipularlo con las manos sucias puede introducir bacterias.
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Reacción alérgica: Los materiales de baja calidad, como ciertos metales, pueden irritar la piel y provocar infecciones.
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Traumatismos: Tirones, golpes o presión constante sobre el piercing pueden causar heridas y facilitar la entrada de gérmenes.
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Infecciones tardías: ¿Te preguntas por qué se infecta un piercing después de años? Esto puede suceder si el tejido cicatrizado se reabre o si el cuerpo reacciona a factores externos como productos químicos, sudor o bacterias.
Cómo curar un piercing infectado paso a paso
Si sospechas que tu piercing está infectado, es fundamental actuar rápido para evitar que la situación empeore. A continuación, te damos los pasos clave para curar un piercing infectado:
1. Lávate bien las manos
Antes de tocar tu piercing, asegúrate de lavarte las manos con agua y jabón. Este paso es crucial para evitar que más bacterias entren en contacto con la zona.
2. Limpia la zona con cuidado
Para desinfectar un piercing, usa una solución salina (mezcla de agua tibia con sal marina no yodada) o un producto específico recomendado por tu perforador. Humedece una gasa estéril y limpia suavemente el área infectada dos veces al día.
3. Evita retirar el piercing
Aunque parezca tentador quitar el piercing para aliviar la incomodidad, hacerlo puede empeorar la infección al cerrar el canal y atrapar bacterias dentro. Déjalo en su lugar mientras sigues limpiando la zona.
4. Aplica un producto antiséptico
Si la solución salina no es suficiente, puedes usar un antiséptico recomendado por un profesional, como clorhexidina o un spray específico para piercings. Evita usar alcohol o agua oxigenada, ya que pueden irritar la piel.
5. Observa los síntomas
Si la infección persiste después de varios días, o si notas fiebre, pus en exceso, dolor intenso o enrojecimiento que se extiende, consulta a un médico de inmediato.
Cómo curar el piercing del ombligo infectado
Los piercings en el ombligo son especialmente propensos a infecciones debido a su ubicación. El sudor, la humedad y el roce con la ropa pueden agravar el problema. Para curar el piercing del ombligo, sigue los pasos mencionados anteriormente, pero presta especial atención a mantener la zona seca y evita el uso de prendas ajustadas mientras se recupera.
Consejos para prevenir infecciones en piercings
Evitar una infección es siempre la mejor opción. Sigue estos consejos para cuidar tu piercing desde el primer día:
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Limpia el área regularmente con solución salina.
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No toques el piercing sin lavarte las manos.
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Usa materiales de calidad, como titanio o acero quirúrgico, para evitar reacciones alérgicas.
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Evita piscinas, jacuzzis y saunas durante las primeras semanas.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuánto tarda en curarse un piercing infectado?
Con el tratamiento adecuado, una infección leve puede tardar entre 3 y 7 días en mejorar. Sin embargo, si los síntomas persisten, es importante acudir a un médico.
2. ¿Puedo usar alcohol para limpiar mi piercing infectado?
No, el alcohol puede resecar e irritar la piel, lo que dificulta la cicatrización. Es mejor usar solución salina o un producto antiséptico específico.
3. ¿Qué hago si el piercing sigue infectado después de varios días?
Si la infección no mejora o empeora, consulta a un profesional médico. Es posible que necesites un tratamiento con antibióticos.
Cuidar correctamente tu piercing es clave para mantenerlo bonito y saludable. Si estás pensando en adquirir nuevos piercings, recuerda que la calidad del material y los cuidados posteriores son fundamentales para evitar infecciones.
¡Dale a tus piercings el mimo que merecen!